China está reforzando su labor conjunta para eliminar los vehículos con altas emisiones de las carreteras.

　 Un comunicado conjunto publicado este miércoles por los ministerios de Protección Ambiental, Seguridad Pública, Hacienda, Transporte y Comercio, exige que las empresas sustituyan este año todos los vehículos de operación comerciales con altas emisiones registrados antes del final de 2005, una meta establecida en marzo en un esfuerzo por mejorar la calidad del aire.

　 Los vehículos que cumplen los estándares del país para su desguace obligatorio pero todavía circulan ilegalmente por las carreteras serán retirados a través de más revisiones exhaustivas y la policía invalidará sus certificados de registro y placas de licencia.

　 Las autoridades chinas también pidieron una supervisión más estricta para el procedimiento de disposición de vehículos viejos, así como de los mercados de coches de segunda mano por todo el país, evitando que los comerciantes vendan las piezas desmontadas de los vehículos descartados a los clientes.

　 Se adoptarán políticas de incentivos para sustituir los vehículos con altas emisiones de las carreteras. Por ejemplo, las autoridades locales están considerando elevar las subvenciones para desechar taxis, autobuses y camiones de carga pesada con altas emisiones.

　 De acuerdo con las cifras publicadas por el Ministerio de Protección Ambiental, hasta el final de septiembre, China sustituyó 823.600 vehículos con altas emisiones por todo el país, lo que supone el 70 por ciento de los vehículos a los que iba dirigida la medida.

Yolanda