La próxima cumbre del Grupo de los 20 (G20) es un buen sitio para discutir tanto las relaciones bilaterales como asuntos de interés global, declaró el presidente de Rusia, Vladimir Putin.

　 Al indicar que la cumbre, que se realizará este fin de semana en Brisbane, Australia, es antes que nada un foro económico, Putin comentó a la agencia de noticias Itar-Tass que el foro aún tiene muchas demandas, aunque las decisiones tomadas allí no son obligatorias, y algunas incluso son ignoradas en cierta medida.

　 Putin criticó las sanciones impuestas a Rusia por potencias occidentales y dijo que esas medidas contraproducentes violan los principios del G20, así como el derecho internacional.

　 Además, Putin dijo que por iniciativa propia no planteará el asunto　en Brisbane porque "sería inútil".

　 "Tales decisiones son tomadas a nivel de bloques y a nivel nacional, son tomadas con base en la comprensión de nuestros socios de sus intereses geopolíticos", señaló.

　 "Creo que eso es　un error, incluso desde el punto de vista de sus intereses geopolíticos", añadió.

　 Las sanciones producirán un efecto bumerán, dañando a quienes las impusieron, así como a las relaciones económicas internacionales en general, expresó.

　 Putin, quien llegó a Brisbane para asistir a la cumbre del G20, dijo reiteradamente que la comunidad internacional debe unir esfuerzos para resolver los numerosos asuntos que enfrenta el mundo.

　 "Todos y cada uno debemos estar conscientes de que la economía y las finanzas mundiales en estos días dependen excepcionalmente unas de otras", señaló.

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