El discurso pronunciado el pasado sábado por el ministro chino de Relaciones Exteriores, Wang Yi, en el Debate General de la 69ª Sesión de la Asamblea General de la ONU envió una clara señal al mundo de que el gigante asiático asumirá un rol más activo a la hora de abordar los asuntos internacionales y las cuestiones candentes.
Wang expuso la posición y las propuestas de China sobre casi todos los asuntos candentes, incluidos Ucrania, Irak, el terrorismo, Siria, Palestina, Irán, Sudán del Sur, Afganistán. la Península de Corea, el ébola y el cambio climático.
Esto muestra el compromiso, la disposición y la dedicación de Beijing por actuar como un actor responsable y asumir más responsabilidades para ayudar a enfrentarse a los problemas internacionales.
En el pasado año, el gigante asiático se ha pronunciado con una voz más elevada y se ha involucrado de una manera más activa y constructiva a la hora de abordar los asuntos globales y regionales, contribuyendo con la sabiduría china, aportando soluciones y ofreciendo a los países en desarrollo más ayuda dentro de su capacidad.
En su discurso, Wang expuso cuatro principios básicos en las relaciones internacionales: tratar a los otros como iguales, ser abierto e integrador, buscar una cooperación mutuamente beneficiosa y defender la justicia.
Como todas las naciones tienen derecho a existir y a desarrollarse, China cree que todos los países deben tratar a los demás como iguales y con respeto con independencia de su tamaño, deben respetar las diferentes religiones, culturas y civilizaciones, y no imponer nunca su ideología a los otros países.
En un mundo globalizado, china se opone a la hegemonía y al juego de suma cero. Al contrario, China siempre ha estado practicando la cooperación de beneficio mutuo en las interacciones con otros países. Las iniciativas del "Cinturón Económico de la Ruta de la Seda" y la "Ruta de la Seda Marítima del Siglo XXI" son los ejemplos de que China pone énfasis en la cooperación de beneficios mutuos.
Aunque muchos consideran que los cuatro principios son fundamentales en las relaciones internacionales, todavía hay otros que siempre los desatienden en sus manejos sobre las disputas y los conflictos.
Con miras a resolver tales problemas, el canciller chino subrayó la propuesta de Beijing: buscar las soluciones políticas, acomodar los intereses de todas las partes, promover la reconciliación nacional y apoyar al multilateralismo.
Siendo un jugador influyente y responsable en los asuntos internacionales, China cree que todas las partes deben abordar la raíz de los conflictos, rechazar la interferencia extranjera sin la autorización de la ONU, y contribuir a buscar de manera justa las soluciones pacíficas y a largo plazo.
Se espera que la influencia china en el mundo vaya creciendo. En contra de las dudas de algunos sobre su supuesta aspiración a la hegemonía, el papel chino servirá para promover la multipolarización, abogar por el rol de liderazgo de la ONU que representa la voluntad y los intereses de cada país y los intereses comunes de la comunidad internacional como un conjunto, y salvaguardar la paz y estabilidad del mundo.