El gobierno chino respalda con firmeza la investigación independiente, justa, objetiva y profesional que realizan los inspectores de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre el supuesto uso de armas químicas en Siria, y antes de que la misión esclarezca la verdad del asunto, todas las partes involucradas deben abstenerse de prejuzgar los resultados ni imponer al Consejo de Seguridad de la ONU (CSONU) la aprobación de cualquier acción contra Siria, manifestó este jueves Wang Yi, ministro chino de Relaciones Exteriores durante una conversación por teléfono con el secretario general de la ONU Ban Ki-moon.
Wang apreció la declaración de Ban de abogar por una solución diplomática para el conflicto sirio, y señaló que una posible intervención militar externa no solamente va en contra de los principios de la Carta de la ONU y las reglas fundamentales de las relaciones internacionales, sino que también causará más bajas civiles entre la población siria y propiciará una escalada de la tensión en Medio Oriente. El canciller chino afirmó que una solución política es la única salida para el conflicto sirio.
A su vez, el jefe de la ONU elogió la postura responsable del gobierno chino sobre la crisis siria, y expresó su deseo de mantener contactos estrechos sobre los temas relacionados con este asunto con el propósito de resolver el problema sirio por vías políticas.
El mismo jueves, también en relación a la crisis siria, Wang Yi sostuvo conversaciones telefónicas con su homólogo germano Guido Westerwelle y el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi. En dichos diálogos, el ministro chino subrayó que todas las partes deben mantener la calma ante el agravamiento del conflicto, resaltando que es inimaginable su resolución a través de una acción unilateral.
XULIO-FER