1996, Atlanta

2008-08-14 10:38:56  spanish

Llegaron los últimos juegos del siglo y del milenio, y el escoger a la ciudad estadounidense de Atlanta como sede, generó gran polémica. Algunos críticos atribuyeron la decisión al hecho de que la ciudad es la sede de Coca Cola, insinuando que dicha empresa posiblemente fue determinante en la decisión final. Sin embargo, ante el descontento de las demás ciudades que postularon su nombre, pues la candidata lógica era la ciudad de Atenas, el COI argumentó la seguridad de Atlanta como un factor determinante en la selección. La red de comunicaciones y su infraestructura, son elementos que garantizan el desarrollo de los juegos olímpicos.

En una ironía de la vida, años después Atlanta aparecería como una de las ciudades más violentas de Norteamérica por metro cuadrado y el desarrollo de los juegos estuvo rodeado de un halo de violencia por el estallido de una bomba de mediano poder en el parque centenario, con un resultado fatal de 2 muertos y 112 heridos. No obstante, los juegos continúan.

El mandatario Bill Clinton inaugura las olímpiadas. Participan 10.800 atletas y 197 delegaciones.

Michael Johnson logra ganar en los 200 metros planos imponiendo un fabuloso récord olímpico de 19.32 segundos. Además obtiene el triunfo en los 400 metros planos. Carl Lewis, al ganar la medalla de oro en el salto largo, iguala el récord histórico impuesto por el atleta finlandés Paavo Nurmi de 9 medallas de oro en atletismo.

Nigeria sorprendentemente gana en fútbol, hecho histórico si se tiene en cuenta que nunca antes un país africano había obtenido la presea dorada en un torneo internacional del deporte más popular del mundo.

La historia continúa

Mientras usted lee estas páginas, la historia de los juegos olímpicos continúa escribiéndose en Sidney, Australia, ciudad en donde compiten una vez más casi 11.000 atletas de naciones de todos los rincones del planeta en el marco de la edición número 27 de las olímpiadas de la era moderna.

La pasión que despierta el evento en todo el orbe al observar en competencia a un selecto grupo de personas que, en muchos casos, ha dedicado toda su vida a preparar ese momento, no se compara con la de ningún otro acontecimiento.

Sin embargo, el hecho más importante es la esperanza de que el ejemplo de sana competencia, compañerismo y juego limpio, sirva de aliciente para que millones de seres humanos en el mundo tomen la decisión de practicar alguna disciplina deportiva para mejorar de manera muy significativa su calidad de vida. En efecto, aquella premisa de que "deporte es salud", conocida por los antiguos atletas griegos y comprobada una y otra vez por estudios científicos apoyados en la tecnología moderna, debe ser la principal motivación para que la actividad física, competitiva o no, haga parte de la vida cotidiana de todo ser humano.