Atmósfera de calidad para los JJ.OO.

2008-06-12 10:23:07  spanish

En julio de 2001, Beijing ganó el derecho de acoger los Juegos Olímpicos de 2008. El Gobierno chino prometió inmediatamente alcanzar tres objetivos sobre la calidad atmosférica de la capital del país durante la cita estival del próximo verano: primero, supervisar y controlar diariamente la proporción de bióxido de azufre, monóxido de carbono, bióxido de nitrógeno y partículas en el aire; segundo, mejorar en todos los aspectos la calidad del medio ambiente local; y tercero, garantizar los índices de los cuatro contaminantes mencionados y llegar al estándar nacional y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante los JJ.OO., o sea, garantizar la buena calidad atmosférica de la ciudad para agosto venidero.

A medida que se acerca la inauguración del magno evento deportivo, la calidad atmosférica de Beijing se convierte en uno de los temas más preocupantes para los deportistas, tanto chinos como extranjeros. ¿Qué resultados han aportado hasta el momento las regulaciones ambientales adoptadas?

Actualmente, en la zona urbana de Beijing, se distribuyen 27 estaciones para supervisar y controlar a tiempo completo la calidad atmosférica. Según los datos que reportan esos puntos de monitoreo, los departamentos nacionales de protección ambiental calculan el Índice de Contaminación Atmosférica, indicador que oscila de 1 a 500. El número más alto significa la presencia de la contaminación más grave y peligrosa para la salud humana. Por debajo de 100 equivale a "cielo azul". Las cifras se publican todos los días en los sitios Web de la Administración Estatal de Protección Ambiental (AEPA) y la Administración Municipal de Protección Ambiental de Beijing, además de otras páginas en Internet de medios importantes de comunicación.

Simultáneamente se puso en práctica el trabajo de verificación sobre la producción limpia de 105 empresas. El Grupo Siderúrgico de la Capital emprendió su traslado desde una zona capitalina hacia un lugar más retirado, a partir de 2005, y la Fábrica de Coquería de Beijing dejó de funcionar, por lo que el nitrógeno sintético, carburo cálcico, ácido sulfúrico, petróleo-gas y otros 27 productos industriales tradicionales se retiraron de la producción.

Además, la ciudad también se dedica a desarrollar la economía circulatoria, promueve en más de 150 empresas el uso sintético de los recursos, como por ejemplo el modo de tratamiento de los desechos. Ha construido tres plantas eléctricas para la incineración de la basura, seis fábricas de mantillo bioquímico para el procesamiento de los residuos y seis campos destinados al enterramiento de estos, que son fermentados con bacterias anaerobias. Igualmente, han avanzado mucho los proyectos ejemplares de tratamiento de neumáticos y plásticos desechables y el Gobierno promueve el uso de las energías limpias, como la solar y el gas de los pantanos, entre otras.

A partir del 1 de marzo de 2008, Beijing empezó a aplicar oficialmente el Estándar Nacional IV sobre el escape de los automóviles y prohibió la venta y solicitud de marcas que no satisfagan los requisitos. Atendiendo a ello, se pronostica que la práctica del estándar IV contribuya a bajar la contaminación de un 15 a un 20 por ciento.

En 1998 la ciudad tuvo 100 días con cielo azul, mientras en 2007 el número aumentó hasta 246 días. Entre los cuatro contaminantes más importantes, los volúmenes de bióxido de azufre, monóxido de carbono y bióxido de nitrógeno alcanzaron índices estándares y las partículas perjudiciales para la respiración suspendidas en el aire también experimentaron una reducción considerable.

El gobierno capitalino muestra que la publicación del índice de la calidad del aire va a aumentar desde una vez al día a varias veces y se esfuerza por mantener la supervisión y el control en todo momento. Shi Hanmin, director de la Administración Municipal de Protección Ambiental de Beijing, reveló que se instalarán una o dos divisiones de monitoreo cerca de todos los campos o estadios deportivos, los que han pasado el examen durante las competencias de prueba "Buena Suerte, Beijing", celebradas a lo largo de 2007.

En esos días, aparte de los 27 sitios regulares de monitoreo de la contaminación del aire, se activaron otros diez en el Parque Forestal Olímpico, la cancha de voleibol de playa y a lo largo del trayecto de la prueba de ciclismo de ruta, como en el Templo del Cielo, el Centro Deportivo Olímpico, el distrito de Changping y el Paso Juyongguan y el tramo Badaling de la Gran Muralla, para conocer la calidad del aire a tiempo.

Según Shi Hanmin, durante los JJ.OO., aparte de las medidas regulares, Beijing suspenderá la producción de algunas fábricas y limitará la circulación de vehículos motorizados. Los coches podrán utilizarse en días alternos, de acuerdo con la terminación de su matrícula, si es impar o par, y además, cerca de un 50 por ciento de los carros de los órganos del Gobierno y las empresas e instituciones públicas dejarán de transitar, como ya lo hicieron en los días de la celebración del Foro China-África.

Estas medidas se tomarán considerando afectar lo menos posible la vida de los ciudadanos y se pondrán en práctica una semana antes de la apertura de la Villa Olímpica, el 27 de julio próximo, y se abolirán después de la clausura de los Juegos Paralímpicos, en la segunda quincena de septiembre siguiente. Al mismo tiempo, el Gobierno también estudia las medidas para compensar al público por tales limitaciones, principalmente en lo relacionado con la exención parcial o total de los cobros para el mantenimiento de las carreteras.