COBRANDO NUEVO IMPULSO
Xi y sus camaradas deberán tomar medidas para garantizar que China evite la "trampa del ingreso medio", lo que pocos países en vía de desarrollo han logrado hacer, y al mismo tiempo se siga abriendo para impulsar el crecimiento global.
En su discurso de Año Nuevo, Xi pidió a la nación "remangarse y trabajar más duro".
Antes del inicio de las sesiones, Xi visitó la provincia de Hebei y dijo que el alivio de la pobreza era fundamental para la construcción de una sociedad modestamente acomodada.
Durante el periodo 2013-2016, 55 millones de chinos abandonaron la situación de pobreza, un número mayor a la población de la República de Corea. La meta de China es eliminar completamente la pobreza para 2020.
Durante un recorrido de inspección por Beijing, Xi hizo énfasis en la importancia de construir una ciudad orientada a la gente solucionando problemas como la superpoblación, la congestión vehicular, los altos precios de la vivienda y la contaminación ambiental.
Así mismo, el jefe del Estado subrayó la necesidad de un desarrollo coordinado del cinturón Beijing, Tianjin, Hebei, el ambicioso proyecto de integrar los más de 100 millones de personas que habitan en la capital y la zona aledaña a ella con el fin de convertirla en un importante motor para el crecimiento económico del país. En los últimos tres años se han cosechado enormes progresos en transporte, industria y protección ambiental.
En un taller realizado en febrero, al que asistieron funcionarios de nivel provincial y ministerial, Xi los urgió a "escoger la carga más pesada y romper las nueces más duras" en la búsqueda del desarrollo económico y social.
"El discurso de Xi en el taller estaba basado en el Marxismo, y proveerá las bases ideológicas para el XIX Congreso Nacional del PCCh", dijo Zhu Lingjun, de la Escuela del Partido del Comité Central del PCCh.
El presidente también se está esforzando por establecer un paisaje global caracterizado por resultados de ganancia compartida, desarrollo común e igualdad, resaltando la imagen del país como un jugador activo y responsable en la gobernanza global.
Xi asistió a la reunión anual del Foro Económico Mundial, en enero, inspirando al mundo al abogar por el libre comercio y advirtiendo sobre los riesgos y peligros del proteccionismo.
El mandatario dijo en el foro que China no solo es beneficiaria de la globalización económica sino que también contribuye a ella. Para este fin, ha llamado en repetidas ocasiones a la construcción de "una comunidad de futuro compartido para toda la humanidad".
A comienzos de febrero, Xi y su homólogo estadounidense, Donald Trump, sostuvieron una conversación telefónica sobre los lazos bilaterales, un buen primer paso para consolidar las relaciones entre las dos economías más grandes del mundo.
"Se trata de las dos naciones líderes (del mundo) y es crucial que haya comunicaciones abiertas de modo que no se presenten malos entendidos", dijo Darrell West, director de Estudios de Gobernanza del grupo de expertos Brookings Institution.
En mayo, China celebrará un foro de cooperación internacional sobre la iniciativa de la Franja y la Ruta, para hacer la globalización más inclusiva y benéfica. Posteriormente, en septiembre, realizará una cumbre del bloque de países emergentes que conforma junto con Brasil, Rusia, India y Sudáfrica, mejor conocido como BRICS.