El equipo de Rusia al completo ha sido excluido de la competición de los Juegos Paralímpicos que tendrán lugar en el mes de septiembre en Río de Janeiro. El motivo no es otro que el castigo por el dopaje de Estado que se practica en el país. La implacable decisión del Comité Internacional (CPI) Paralímpico supone un contrapunto respecto a la postura del Comité Olímpico Internacional (COI), que dejó en manos de las Federaciones la decisión de permitir participar en los Juegos Olímpicos a los deportistas rusos.

El CPI ha condenado enérgicamente el escándalo de dopaje destapado en Rusia. "Suspendemos provisionalmente como miembro al Comité Paralímpico Ruso y, por ello, el equipo ruso no competirá en los Juegos de Río", anunció Philip Craven, presidente del CPI, en rueda de prensa en Río de Janeiro.

Craven cifró en 44 los deportistas rusos cuyas pruebas antidopaje fueron manipuladas durante los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi en 2014, según el informe encargado por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA).

Por otra parte, el ministro ruso de Deporte, Vitali Mutkó, aseguró el domingo que su país demandará el fallo del Comité Paralímpico Internacional (CPI) ante el tribunal de arbitraje y catalogó de político el veto a Rusia a los juegos de 2016.

El titular ruso paralímpico, Vladimir Lukin, comentó, a su vez, que con la asistencia de juristas de su país plantearán de inmediato una demanda ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo en Lausana, Suiza. Esto comienza ahora, expresó a la prensa.

Sha