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Contribuir al éxito de los Juegos Olímpicos es un deber y un honor --- Entrevista con el voluntario de mayor edad del MPC
2008-08-08 09:52:44   CRI

Entre los numerosos voluntarios que trabajan en el MPC, siglas inglesas del Centro Principal de Prensa, el de mayor edad es Hao Tong, quien este año cumple 71 años. Su trabajo en el MPC consiste en ofrecer información a periodistas de todo el mundo y en resolverles sus dudas. Al ver a este anciano de pelo cano respondiendo incansablemente y con paciencia todo tipo de preguntas, sentimos curiosidad por saber qué le ha impulsado a trabajar aquí. Nuestro reportero Chen Mo nos da la respuesta en el siguiente reportaje.

Sentado entre un grupo de jóvenes, el anciano Hao Tong llama mucho la atención. Casi todos los periodistas que hemos venido a visitar el MPC le hacemos la misma pregunta: "¿Usted también es voluntario?". Tras contestar afirmativamente, Hao Tong añade que lo que le animó a sudar la camiseta por los Juegos Olímpicos en el caluroso verano beijinés es su gran afición al deporte y a las Olimpiadas.

"¿Por qué tengo un sentimiento especial hacia los Juegos Olímpicos? Pues porque en los Primeros Juegos Nacionales, los celebrados en 1959, representé a la provincia de Shaannxi en la competición de balonmano. Además, en 1999 hice de voluntario en los Juegos Asiáticos de Beijing. Ahora me toca prestar mis servicios durante los Juegos Olímpicos. A pesar de mi avanzada edad, tengo muchas ganas de participar en este magno evento internacional."

Hao Tong, ingeniero de alta categoría del Instituto de la Industria Química de Beijing, se jubiló hace un par de décadas. Ahora, todos los días se pone la camiseta azul de voluntario y durante doce horas trabaja codo con codo junto a sus compañeros universitarios. No cabe duda de que este ritmo de trabajo supone un gran reto para el aguante físico de una persona mayor de 70 años. Sin embargo, Hao Tong parece sacar fuerzas de las continuas alegrías que le depara el desempeño de su tarea.

"Este trabajo es muy interesante. La mayor parte de los voluntarios son universitarios y muchos de ellos estudian lenguas extranjeras o ciencias de la comunicación. Mi caso es excepcional, ya que mi especialidad pertenece a las ciencias naturales. Ahora me turno en el trabajo con los jóvenes y me siento como si hubiera retrocedido 40 años en el tiempo, como si acabara de salir de la universidad. La verdad es que es una sensación maravillosa."

El hecho de trabajar con gente joven no es lo único que depara alegrías a Hao Tong. Gracias a su participación en los Juegos Nacionales y a su experiencia de estudiante en el extranjero, este anciano sabe muy bien que el éxito de los Juegos Olímpicos del 2008 reviste una importancia transcendental para China. En su opinión, la celebración de las Olimpiadas de Beijing servirá para mostrar al resto del mundo una China poderosa.

"Los Juegos Olímpicos de Beijing es un gran acontecimiento para nuestro país. Mi afición por el deporte empezó cuando iba a la escuela secundaria. En los entrenamientos colectivos para los primeros Juegos Nacionales me enteré de que en 1932 China estuvo representada por primera vez en unas Olimpiadas. Tras superar todo tipo de obstáculos, Liu Changchun participó en los Juegos Olímpicos de los Ángeles en representación de la nación china. Nuestro país ha hecho y está haciendo enormes esfuerzos por organizar una buenas Olimpiadas. Creo que el poder contribuir a su éxito es un deber y a la vez un gran honor."

Hao Tong considera que el trabajo de los voluntarios es una misión sagrada. El año pasado presentó su solicitud al COJOB, el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing, y superó las pruebas sin contratiempos. Su mayor deseo es que sus conocimientos y su ayuda sirvan para que los periodistas extranjeros conozcan China más y mejor.

"Ya he tenido contactos con los periodistas españoles y brasileños. Como de momento no estoy muy ocupado, después de proporcionarles la información básica, charlé con ellos. Uno de ellos viene de Barcelona, ciudad que he tenido la suerte de visitar, incluido su Estadio Olímpico. Como había temas que los dos conocemos, la conversación resultó muy interesante."

Al igual que los demás voluntarios, Hao Tong trabaja de todo corazón por el éxito de los Juegos Olímpicos de Beijing. Su recompensa es trabar nuevas amistades a diario y vivir más alegre.

 
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