Tras subrayar que una relación saludable entre China y EEUU ayuda a fomentar condiciones mejores para que las empresas estadounidenses cooperen con sus similares chinas, Xi animó a Boeing a seguir impulsando la cooperación con el país asiático y a efectuar nuevas contribuciones a la cooperación económica y las relaciones generales entre los dos países.
El desarrollo de China, precisó, creará más oportunidades para las compañías estadounidenses y abrirá un nuevo espacio para una cooperación mutuamente beneficiosa aun más estrecha entre las empresas de una y otra nación.
Acompañado por Ray Conner, presidente de Boeing Commercial Airplanes, Xi visitó el taller de ensamblaje de la fábrica mostrando gran interés y preguntó sobre los esfuerzos de la empresa en ahorro energético y reducción de emisiones, así como sobre sus ideas de diseño para los futuros aviones.