El origen del proverbio se remonta a la época de los Reinos Combatientes. Según se cuenta, en esos tiempos, un funcionario del Reino de Qi,llamado Zhou Ji, de porte esbelto y bello, una mañana, examinando en el espejo su aspecto, su buena ropa y su gorra, le preguntó a su esposa:

"¿Quién es más hermoso, yo o el señor Xu del norte de la ciudad?"

Su esposa le dijo:

"El señor Xu no puede compararse contigo,tu eres más hermoso que él."

Sin embargo, Zhou Ji no le crey¨® a su esposa en razón de que el señor Xu tenía fama de ser el hombre más bello de todo el reino de Qi.

Entonces le preguntó a su concubina:

"¿Quién es más hermoso, yo o el señor Xu?"

Su concubina le respondió:

"El señor Xu no es tan hermoso como tú".

Al día siguiente, por la mañana, cuando recibió una visita, el señor Zhou Ji volvió a hacerle la misma pregunta al visitante. Y éste le dijo lo mismo que le hab¨ªan dicho su esposa y su concubina.

El tercer día, el señor Xu vino a su casa por casualidad. Zhou Ji lo miró con detenimiento y llegó a la conclusión de que él era menos que el señor Xu. Se miró una y otra vez en el espejo y se convenció de que,efectivamente, el señor Xu era mejor que él. Esa noche,acostad en su cama, el señor Zhou Ji pensó mucho y llegó a comprender la verdad: En realidad, mi esposa me había dicho que yo era más hermoso que Xu por amor; mi concubina, porque me tenía miedo; y el visitante, porque necesitaba mi ayuda.

Otro día, Zhou Ji fue al palacio y le dijo al Rey Qiwei:

"Yo s¨¦ que soy menos hermoso que el señor Xu, pero mi esposa me ama, mi concubina me tiene miedo y la persona que me visita, necesita mi ayuda. Cada uno de ellos tiene su raz¨®n para decir que soy m¨¢s hermoso que el señor Xu. Ahora, el Reino de Qi tiene una superficie de m¨¢s de mil kil¨®metros cuadrados con m¨¢s de 120 ciudades y pueblos. Todas las concubinas de la Corte aman al Rey; todos los ministros tienen miedo al Rey y todos los civiles del Reino necesitan la ayuda del Rey. En ¨¦sto se puede ver que el Rey es v¨ªctima de un gran engaño."

Al escuchar estas palabras, el rey dijo:

"Hablas con sabidur¨ªa. Luego, public¨® un decreto en el que facultaba a todos los funcionarios y civiles a decirle cuales eran sus faltas. Si lo hac¨ªan podr¨ªan aspirar a ganar un gran premio; los que le planteaban propuestas, podr¨ªan lograr un premio ligeramente menor y los que comentaban sus faltas en la calle o en la Corte y sus comentarios llegaban a sus o¨ªdos por intermedio de otro, podr¨ªan alcanzar el otro premio."

Al poco tiempo de promulgado este decreto,todos los ministros fueron a la Corte para formular sus propuestas. La puerta del palacio se ve¨ªa tan concurrida como una feria.

Esto permiti¨® que el pa¨ªs fuera administrado con eficiencia, de modo que los reinos vecinos, al enterarse de ¨¦sto ahondaban su amistad con el Reino de Qi o se anexaron a ¨¦l.

De esta historia sali¨® el proverbio:"La puerta como una feria". As¨ª,una persona que advierte que su vecino tiene muchos hu¨¦spedes, puede decirle: tienes la puesta como una feria.